Miró por la ventana de nuevo, y unas cuantas veces más. Dejaba notar una leve obsesión con el estado del tiempo. Otra tarde gris, otra como tantas. Respira hondo, muerde sus labios. Josefina esperaba una señal absurda, absurda como ella misma.
Dibujó con su boca: "Amor es incertidumbre".

viernes, 10 de septiembre de 2010

¿Viste un fantasma? Incógnita existencial, Marcos dudaba, ¿para qué querría visitarlo por media hora? ¿Porqué tenia esa expresión de pollito mojado? Había cosas que el no sabia, tantas cosas que el no sabia. No terminaba de convencerme su manera de ver las situaciones, no podía vislumbrar si me causaba tranquilidad o repulsión. Yo tampoco sabia que hacia en tu casa solo por media hora. ¿Fuí a dejarte? Fui a decirte que no puedo con la presión. Ya se, tengo algunos problemas, tan solo algunos problemas fermentando en mi mente, y tengo que volver a terapia, y dejar de sentirme culpable por lo que paso cerca de Libertador. Escucho una a una tus palabras, por dentro me río. Para el es todo tan fácil. Fácil decirlo.
La dependencia me asquea, colorada de rulos, acostumbrada a tener el pelo suelto y libre, excitado por el viento. Me seguís dando miedo, no se porque. Usas cada puta palabra, mirada y (cualquier acción, en realidad, que venga de vos) me domina y apacigua la locura que acumulo en barriles y cajones a mi alrededor.
¿Viste un fantasma? Nunca me consideré uno. Siempre creí que los fantasma venían detrás mío, o que yo sola los veía. Me abriste la puerta asustado: "¿Qué haces acá?". Amena bienvenida me tragué entera. Miré para los costados, entre con la columna encorvada: "No me gusta estar sola, lo sabes".

No hay comentarios: