Miró por la ventana de nuevo, y unas cuantas veces más. Dejaba notar una leve obsesión con el estado del tiempo. Otra tarde gris, otra como tantas. Respira hondo, muerde sus labios. Josefina esperaba una señal absurda, absurda como ella misma.
Dibujó con su boca: "Amor es incertidumbre".

sábado, 28 de enero de 2017

Volví a varios lugares que nos habían visto. Testigos silenciosos de eso que no podíamos explicar, pero sentíamos. La incompatibilidad y la pasión, el amor tan confuso, el que te invade todo el cuerpo y te destruye de a poco.
Nos vi de nuevo, siendo nosotros, lo peor para el otro, la locura y la ira. Nos vi también deseosos de ser felices juntos, un imposible que hoy solo puedo entender y aceptar. Necios.
Aprendí, que arruiné todo un poco cada vez que quise que seas otro y diferente, y también aprendí que vos te subiste a esa empresa porque querías ser mejor. No es la culpa de nadie.
Aprendí que la intolerancia mata.
Aprendí que siempre tuviste un pie afuera, que yo siempre estuve demasiado adentro. 
Aprendí que el "nosotros" me comió entera y que el "yo" a vos te obsesionó.
Aprendí que no puedo ser feliz con vos, no entiendo porqué, pero que tengo que aceptarlo.
Te perdí. Siento que lloraré siempre algunas lagrimas cuando te recuerde, cuando pase por eso lugares que vimos juntos, de la mano, yendo en contra la corriente. 
Pero aprendí, por lo tanto gané algunas cosas que son más fuertes que vos, más fuertes que vos y yo, muchísimo más fuertes que nosotros.
Quiero amarme a mi, quererme mucho mucho y abrazarme, quererme tan fuerte para consolarme. Quiero dejar de querernos como alguna vez lo soñé, quiero que deje de doler.
Quiero que la parte de mi que siempre me traiciona, esa que te espera, se vaya apagando, se muera.

No hay comentarios: